Los bebés y el juego

A veces es difícil estableces una clara distinción entre el juego y la exploración: por ejemplo, cuando tu bebé lanza varias veces los juguetes al suelo desde su sillita de comer, es difícil saber si está jugando, o simplemente intenta experimentar con la gravedad. La respuesta es que probablemente sea una mezcla de ambas.

Lo que sí es cierto,es que el juego tiene un papel vital en el desarrollo de tu bebé, y que ninguna actividad de este tipo debe ser subestimada. Según la opinión de algunos expertos, el acto de jugar comienza al tercer mes de vida, cuando el bebé pasa horas tratando de alcanzar los objetos que cuelgan del móvil sobre la cuna, o trata de tocarse los deditos del pie.

El juego es crucial para ayudar al crecimiento sano y feliz de tu bebé. Cada movimiento es clave para su aprendizaje y esencial para el desarrollo de su cerebro. Moviendo todo el cuerpo y usando todos sus sentidos, tu bebé "programa" sus habilidades motoras y de percepción, los nervios y las células del cerebro. Estas habilidades motoras permiten que el bebé sea más independiente y se involucre en el juego social interactuando sanamente con el mundo que lo rodea.

Enseñando a tus hijos a recoger sus juguetes

Si tu hijo deja frecuentemente sus juguetes tirados, ten en cuenta las siguientes ideas para que tu hijo los recoja. ¡Tú puedes hacerlo!

ORGANIZA EL ESPACIO

1. Señala un lugar para guardar los juguetes considerando la estatura de tu hijo ( una caja grande forrada  sería ideal).
2. Clasifica los juguetes y busca una figura de éste y pégala en la caja correspondiente. Por ejemplo, una caja puede ser de muñecos, otro, de bloques de construcción, etc.
3. Planea con anticipación. Antes de sacar los juguetes que tienen partes pequeñas, pon una sábana en el piso y cuando los niños terminen de jugar simplemente recoge la sábana por las esquinas y vacía todas las piezas pequeñas en la caja de juguetes.
4. Mantén disponible una caja para juguetes pequeños y partes extraviadas. Al final del día, tu hijo sabrá dónde buscar objetos extraviados.

CONVIÉRTELO EN UN JUEGO

1. Inventa un "juego", como decir "Yo encuentro un círculo verde", y deja que tu hijo identifique el objeto y lo guarde en la caja de juguetes.
2. Usa un reloj con alarma y juega con tu hijo a: ¿Cuántos juguetes puede recoger antes que suene la alarma? Se divertirá un montón.
3. Haz que cada miembro de la familia recoja 5 objetos y los guarde en el lugar asignado. No te olvides que los niños aprenden también imitando las acciones de los mayores.

AMOR INTELIGENTE

La capacidad de amar no se improvisa, requiere todo un proceso formativo, en el cual se debe aclarar ideas, afinar la sensibilidad para los valores, adquirir el poder de tomar decisiones firmes y aprender a cumplir las promesas que se hace.

Educando en el amor cumplimos con las siguientes funciones:

• Preventiva: Porque nos adelantamos a las dificultades o problemas que se nos presenten.
• Volitiva: Porque va dirigida a la voluntad de cada persona donde se mueve el "querer". La voluntad nos ayuda a buscar el bien.
• Formativa: Porque enseñamos una escala de valores, conocemos esa jerarquía.
• Intelectiva: Porque apunta al conocimiento y búsqueda de la verdad.

La tarea formativa consiste en abrir horizontes nuevos al deseo humano, aprender a valorar lo que todavía no tenemos en la mano, pero que nos llama a que lo realicemos debido a su valor. El amor es el final del camino.

Recomendaciones:

• Planificar la educación quiere decir que los padres deben de haber conversado en "lo que quieren para sus hijos". No podemos exigir aquello que no han sido preparados.
• Hablar siempre con la verdad a los hijos. Decir la verdad obliga en ocasiones a profundizar nuestros conocimientos leyendo más, preguntando a otros.
• Cada hijo es cada hijo, por lo tanto no se puede educar a todos por igual ni compararlos.
• Un niño cuyos padres están presentes y le dedican un rato a hablar con él y a preguntarle cómo le ha ido en el hijo, es un niño más tranquilo y comunicativo.
• Fomentar la práctica de deportes, y si se comparte con ellos es mucho mejor. El hacer cosas juntos hace que los lazos en la familia sean más fuertes.

Educando la voluntad en los hijos

La voluntad es la capacidad que tienen las personas para hacer algo, es decir, decidir y realizar lo decidido. No solo es desear algo, sino hacerlo sin sentirnos obligados.

Se debe educar la voluntad en los hijos por las siguientes razones:

• Por su felicidad y bienestar futuro.
• Para desarrollar su autonomía.
• Porque la inteligencia sin voluntad no es beneficiosa.
• Porque lo ayudará en las decisiones que tome en la vida, ya que cada uno es responsable de ellas.

PERÍODOS MÁS SENSIBLES PARA EDUCAR LA VOLUNTAD A TRAVÉS DE VALORES

De 2 a 4 años: Período del orden

De 3 a 6 años: Período de la obediencia

De 6 a 9 años: Período de la generosidad

De 9 a 12 años: Período de la laboriosidad

De 12 a 15 años: Período de la solidaridad

De 15 a 18 años: Período de la lealtad

"La felicidad es un resultado que consiste en intentar sacar el máximo partido a nuestras capacidades mezclando la lucha tenaz con la alegría"

Técnica para evitar las lisuras en tus hijos

Prepara unos dibujos con bocas abiertas sacando la lengua y una cartulina con sus nombre, y cada vez que uno de tus hijos diga una lisura le pones una boca en el nombre correspondiente. Al final de la semana, el que tenga menos bocas recibirá un premio.

OJO: El tiempo puede ser variables cada dos semanas, cada mes, etc.

TIP 1

Si no ves a menudo a tus hijos por el trabajo, planifiquen juntos actividades para el fin de semana. Así, tus hijos esperarán con emoción el fin de semana.

TIP 2

Tú puedes castigar a tu hijo en casa, en el parque o donde te encuentres.